Los principios según los cuales se organizan la defensa y el contrataque:
- La trayectoria económica del movimiento, como principio trascendente de orientación.
- El principio de simultaneidad o sincronicidad de defensa y contra-ataque (como la forma más racional de la acción en contra).
- El método de proceder de fuera adentro, o sea, de repeler el ataque —a ser posible— desde fuera y luego acercarse al contrario hacia dentro.
- El método de la inmovilización: con él quedan inmovilizadas o clavadas las armas ofensivas del contrario. Se subdivide en:
- inmovilización de la pierna para impedir una patada del contrario
- Inmovilización mediante la técnica de las manos atrapadas o al cerrojo (técnica del tapón o llave); además también la inmovilización completa, en la que brazos y piernas quedan bloqueadas al mismo tiempo.